"Eman ta zabal zazu munduan frutua" ("Gernikako Arbola", de Iparragirre)

12 de octubre de 2005

Paradojas (I)

Ser cristiano te aporta una serie de cosas.

Por una parte, te impide considerarte una mierda. Como cristiano, como hijo de Dios, eres la maravilla de la Creación: aquello para lo que todo fue hecho. Por muy débil, inconstante, triste, inútil o pecador que seas, eres algo semejante al Dios Todopoderoso.

Y no sólo eso, sino que el mismo Dios Todopoderoso te mira, directamente a ti, con toda su atención; se alegra de cada uno de tus logros, contiene la respiración con cada uno de tus esfuerzos, y se duele con tus caídas (y, para que esto nos quedara bien claro, lo hizo hasta físicamente).

Y además de importarle, Se fía de ti, y pone en tus manos los instrumentos para hacer Su obra. Por mucho que nosotros no creamos en nosotros mismos, Él sí cree, y nunca dejará de creer.

Ser cristiano es una de las pocas formas legítimas de estar tremendamente orgulloso de ser seres humanos. Es algo para meditar.

Escrito por Eleder a las 11:34 p. m.

Blogs (renovando links...)
 Esperando Nacer
 Splendor veritatis
 Una rusa en Barcelona
 Mar Adentro (Lc 5,4)
Blogs amigos (renovando links...)
 Docking Bay 94
 Cuaderno de bitácora del Vingilot
 Íberos
 Dance de la Mort
Cosas que hacer

El Transsiberiano
Correr una maratón
El GR-10 entero
Los 100 montes

agosto 2005
septiembre 2005
octubre 2005
noviembre 2005
diciembre 2005
enero 2006
febrero 2006
marzo 2006
abril 2006
mayo 2006
junio 2006
julio 2006
agosto 2006
septiembre 2006
octubre 2006
noviembre 2006
diciembre 2006
enero 2007
febrero 2007
marzo 2007
mayo 2007
junio 2007
julio 2007
diciembre 2008
enero 2009
febrero 2009
marzo 2009
abril 2009
mayo 2009
junio 2009
septiembre 2009
octubre 2009
diciembre 2009
diciembre 2010
junio 2012
enero 2013
Libros leí­dos en 2006

¡Muchas gracias a Dan Solo por el diseño!